004.- AUDIENCIA 04.- 17 DE NOVIEMBRE DE 2020
En la cuarta audiencia del debate oral con modalidad virtual del Juicio Brigadas Banfield, Quilmes y Lanús, se exhibieron los testimonios previos de Nilda Eloy y Alcides Chiesa sobrevivientes de los CCD Pozo de Quilmes y El Infierno, que fallecieron en estos últimos años.
La audiencia comenzó con el anuncio, a través de personal del Servicio Penitenciario, de que los imputados Di Pascuale y Etchecolatz se iban a negar a participar de la videoconferencia. A pesar de la intervención de la abogada Guadalupe Godoy solicitando que estén presentes y aseverando que no se trata de una cuestión voluntaria por parte de los imputados, el Tribunal consideró que no es un acto donde la presencia sea indispensable y que están en su derecho si los representa su defensa.
La presencia de los imputados durante las audiencias fue un reclamo que realizaron todas las partes acusadoras durante las audiencias preliminares al juicio.
Por otro lado, la defensa del imputado Ferreyro realizó planteos sobre el escrache que organizaciones populares realizaron durante el fin de semana a la casa de City Bell donde transcurre su prisión domiciliaria.
Para el inicio de la audiencia, estaba previsto que se tomara declaración indagatoria al imputado Ricardo Fernández, a quien ayer el Tribunal luego de diversas pericias, lo consideró en condiciones de estar en juicio. Sin embargo, el imputado alegó dificultades para conectarse, lo que provocó un nuevo reclamo de las partes acusadoras.
El otro imputado cuya declaración indagatoria estaba pendiente, De Lio, fue internado el día de ayer, según informó el defensor particular al Tribunal. La internación coincide con el arribo al Tribunal de las pericias que confirmaban su capacidad de estar en juicio.
Luego comenzó la exhibición de los testimonios previstos. El primero fue el de Nilda Eloy, sobreviviente, miembro de la Asociación Ex Detenidos Desaparecidos y referente de la lucha por la aparición con vida de Jorge Julio López. Se proyectó el registro audiovisual de la declaración brindada en el juicio Etchecolatz, en el año 2006.
Nilda relató que fue secuestrada a los 19 años, del domicilio de sus padres el 1 de octubre de 1976 a las 12 de la noche, por una patota al mando de quien más adelante pudo asociar con Etchecolatz a través de un programa de televisión donde lo vio en la década de los 90. Contó su recorrido por diversos CCD. Relató su ingreso el 4 de octubre al Pozo de Quilmes, donde estuvo alrededor de cinco días . Allí Emilce Moler la reconoció por haberla visto en el secundario -ambas iban al Bachillerato de Bellas Artes de la UNLP- cuando interpretaba a Morticia Adams. Agregó que en esos momentos “que alguien te reconociera era volver a la vida”.
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=u7YHHbKS3T4&w=560&h=315]
Luego contó su recorrido por Arana y por otro CCD que no ha podido determinar si era o no El Vesubio. Posteriormente relató su paso por la Brigada de Investigaciones de Lanús, conocida como El Infierno y las durísimas condiciones en las que estuvo allí. Nilda contó que durante el transcurso del Juicio por la Verdad reconoció a Miguel Angel Ferreyro -que hoy no estuvo presente en el debate- como uno de los policías que estaban en el lugar y uno de los responsables de las violaciones que sufrió allí.
El 31 de diciembre fue trasladada a la comisaría 3era de Lanús. Desde ese lugar logró avisar a su familia, a través de otros presos, que estaba viva. Recordó que su desesperación era porque aún no había sido legalizada: “no figuraba en ningún lado, pasaban los meses y no figuraba, no existía” y que esa situación cambió recién cuando la trasladaron a Devoto, donde quedó a disposición del Ejecutivo.
Sobre su detención agregó a lo dicho que “todo estaba preparado para que uno se cosificara, habían perdido su nombre, su relación con el día, la hora, el tiempo, ahí adentro siempre hacía frío, era como si fuera un túnel continuo a pesar de los traslados, era siempre lo mismo”. Fue liberada a principios del año 1979.
Luego se dio lectura en el debate de dos declaraciones testimoniales de Nilda Eloy, dadas por escrito en la instrucción de la causa. En ellas, Nilda relató con detalle las condiciones generales de detención y algunas circunstancias específicas vividas por ella y otros detenidos en El Infierno y el rol de Ferreyro en esos hechos.
El segundo testimonio exhibido fue el de Alcides Chiesa, tomado originalmente en el marco del juicio conocido como Circuito Camps en el año 2012 y proyectado en esta oportunidad por su secuestro en el Pozo de Quilmes. Alcides era cineasta, había estudiado en la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (Enerc), pero debido a la persecución sufrida en la dictadura y su posterior exilio, recién recibió su título en el año 2015: “Cuando años más tarde volví para ver cómo hacía para terminar el trámite y recibirme, la persona que todos los días me saludaba me dijo que de ninguna forma yo había cursado ahí, que no había pasado nadie con mi nombre, que lo que yo decía era mentira. Y eso que ya era durante el gobierno de Alfonsín”.
Alcides relató su secuestro el 15 de octubre de 1977. Reconoció su lugar de detención como la Brigada de Quilmes porque junto a su padre había construido el portón de la Brigada y tenía un defecto que le permitió reconocer su sonido cuando se abrió. Contó su paso por Puesto Vasco donde lo interrogaban sobre “actividades sindicales en el cine” y su vuelta a la Brigada.
Recordó su amistad con Juan Antonio Ginés, con quien había militado en la JP. Sobre su militancia contó: “más que nada militaba en política cultural, hablaba con la gente de cómo hacer películas, enseñábamos teatro en las villas.”
Relató que a veces sacaban gente: en una oportunidad se encontró paseando por Quilmes en un auto con tres de “la patota” muy borrachos y pensó en escaparse. Sin embargo, señaló la vulnerabilidad a la que estaban sometidos en esa situación, sintiendo que no tenían a quien recurrir ni quien los protegiera: “esa sensación de no ser nada, que a lo mejor no lo entienden los acusados de este juicio que tienen la posibilidad de defenderse, nosotros no teníamos nada”.
Alcides fue trasladado a la comisaría de Villa Echenagucía, y luego a la Unidad 9 de La Plata donde pasó dos años. Posteriormente lo llevaron en avión a Rawson, donde estuvo un año hasta que volvió a la unidad 9, el 29 de diciembre de 1980. Por último, el 21 de julio de 1981 fue liberado.
Finalizadas las exhibiciones de testimoniales y ante la ausencia del imputado Fernández, el Tribunal pasó a cuarto intermedio hasta el día 24 de noviembre. Para ese día, se encuentra prevista la declaración de las integrantes del Equipo Argentino de Antropología Forense, para dar cuenta de las identificaciones realizadas de personas que son víctimas de esta causa.
El juicio continuará el martes 24 de noviembre a las 9:30hs
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=-7sarRV2sYM&w=560&h=315]