Emil Hermann Bose

    Nació en Bremen, (Alemania) el 20 de octubre de 1874 y Murió el 25 de mayo de 1911 en La Plata. Fue el primer Director del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Nacional de La Plata, pionero en la investigación en Física en el país y Director del Instituto de Física.
     
    La investigación en Física se inició en la Argentina en la Universidad Nacional de La Plata y sus físicos adquirieron una elevada jerarquía científica internacional, en gran parte gracias a contar con un Instituto de Física dirigido por un experto como Emil Hermann Bose. En el marco de la búsqueda y contratación de científicos extranjeros que se da en el período  de la gestión de Joaquín V González, llegó al país y a la Universidad, el físico Emil Bose , junto a su esposa (también física) Margrete Heiberg.

    En 1909, González transformó al Instituto en una Escuela de Física dependiente de la nueva Facultad de Ciencias Físicas, Matemáticas y Astronómicas y buscaba contratar un profesor alemán para dirigirlo. Para ello envíó a sus emisarios a Europa, fue   convocado Emil Bose, quíen había crecido en el seno de una austera familia luterana.

    Estudió física, química y matemáticas  en Göttingen. En 1898 se doctoró y a pesar de su juventud , cuando llegó a  La Plata era autor de 67 trabajos científicos. El 9 de junio, ya en La Plata, integró al Consejo Académico de la Facultad y presentó el nuevo plan de estudios para el Doctorado en Física.

    Poco tiempo después solicitó un nuevo edificio y se le otorga el que se estaba construyendo para albergar los Laboratorios de Física y Química del Colegio Nacional y en el que actualmente se desenvuelve el Departamento de Física de la Facultad de Ciencias Exactas. Una de las primeras acciones de Bose en su carácter de Director de la Escuela es dirigirse a González reclamándole los aparatos de Física destinados a completar el Gabinete, las revistas y demás obras con las cuales se constituirá la Biblioteca Científica de la Escuela y las maquinas y materiales necesarios para instalar definitivamente el Taller Mecánico de Precisión.

    La pasión del físico alemán por su trabajo en la Universidad llegó a tal punto que, viendo la demora de la construcción, solicitó él mismo hacerse cargo de la dirección. Esto le fue concedido en febrero de 1910. Logró además un equipamiento como no había en todo el país. Todo el sótano se llena de maquinaria para poder realizar experimentos  con aparatos que el eligió cuidadosamente y que fueron instalados por técnicos alemanes.

    Además, Bose se ocupó de crear una biblioteca científica con las revistas más importantes de física y una serie de manuales y tratados de las materias que se van a dictar en la Escuela. El número de obras era considerable y comprenden los últimos adelantos en las ciencias físicas.

    La gran inauguración pública de las instalaciones de la Escuela de Física fue el 29 de marzo de 1911. Esto se llevó a cabo con una conferencia a cargo de Emil Bose. Todos los diarios de la época hablaron de la conferencia, de la figura del físico y de la Universidad de La Plata. Emil Bose sabía cómo impactar a la audiencia y a los medios. Las conferencias tuvieron que ser repetidas porque un amplio público ávido, no siempre ligado a la ciencia quedaba fascinado con la experiencia.
     
    Para el diario El Día, se había roto el molde de las conferencias clásicas, meros “torneos oratorios”, con una conferencia que consistió en una explicación clara y concisa .Los diarios reproducían de este modo parte de la conferencia: “Un grueso alambre de hierro fue enrojecido por esa corriente y pocos minutos después caía al estado líquido, destruyéndose la varilla. Mostró después otro de los importantes elementos con que cuenta la escuela: la máquina de compresión y la fabricación de aire líquido.  (…) Se mantenía intensa la atención del auditorio, que parecía convocado a una sesión de magia o a una alta reunión científica no sospechada dentro de nuestro medio, cuando llegaron en turno los experimentos con aire líquido, obtenido también en el instituto por obra de sus importantes y costosas instalaciones.

    Después dio una ligera explicación sobre la licuefacción del aire y la conservación del mismo una vez licuado. El frío intenso del aire líquido transformó un tubo de goma en tal forma que se rompía poco después con un martillo, como si se tratase de un trozo de vidrio. Efectos curiosísimos análogos se obtuvieron con el mercurio, con flores, etc. El aire líquido contenido en una tetera hirvió al ser colocado sobre una barra de hielo… Realizadas otras experiencias el doctor Bose dio fin a su conferencia en medio de una salva prolongada de aplausos, que se extendió después en calurosas felicitaciones “.
      
    De acuerdo a quien fuera su alumno, y luego reconocido físico,  Teófilo Isnardi, Bose “tenía el gesto espontáneo y el saludo amplio de los hombres sinceros; la silueta, alta y un poco encorvada, daba la impresión de un perpetuo buscador escrutando desde su elevado plano mental los secretos del mundo físico y moral que lo rodeaba”.  Luego dice: “los ojos grandes y azules, de una dulzura apostólica, cuando no de una energía dominadora…el rostro…iluminado a veces por una sonrisa inteligente, sin suspicacia y sin ironía, y acaso un poco melancólica, como si presintiera su destino, o reflejara todos los infortunios de su vida”. La primera esposa de  Bose falleció al dar a luz a su hija Elschen y que a su vez la frágil niña falleció el mismo día en que nació su hijo Walter Bose. 

    Murió muy joven, a los 37 años, enfermo de fiebre tifoidea el 25 de amyo de 1911.
     
    Fuente:  Bibiloni A.G. Emil Hermann Bose y Margrete Elisabet Heiberg-Bose, pioneros de la investigación en física en la Argentina. 
    Departamento de Física, Facultad de Ciencias Exactas, Universidad Nacional de La Plata  y CONICET.