Laúd de cascara, de cuello (321.321-6). Se lo encuentra documentado en la India desde la antigüedad, con diferentes formas y nombres. Según la tradición, el poeta y músico Amir Khusru (1254-1324), durante el reinado mogol, invirtió el orden de las cuerdas, ubicando la más aguda a la izquierda del ejecutante, e introdujo los trastes móviles, para facilitar el empleo de diferentes raga (s).
Además le asignó su nombre definitivo (del persa se = tres y tar = cuerda). Actualmente es el instrumento más popular en el Norte del subcontinente, integrando con el laúd tambura y los membranófonos tabla el conjunto típico de esa región.
Existen distintas variedades de sitar (s). La más frecuente, a la que pertenece el ejemplar del museo, posee siete órdenes simples de metal que pasan sobre los diecinueve trastes. Los cuatro o cinco más agudos, especialmente el primero, sirven para el desenvolvimiento melódico. Son punteados por un mizrab, plectro de alambre colocado en el índice derecho, mientras el índice y mayor de la mano izquierda acortan su longitud vibrante. Los órdenes restantes (chikaris) realizan sólo notas pedales y se pulsan con el meñique derecho.
El encordado se completa con once cuerdas simpáticas de diferente longitud, tendidas bajo los trastes y que se introducen en pequeños orificios practicados en el diapasón para luego sujetarse a las clavijas distribuidas a lo largo del cuello.
Etiqueta: LAHORE MUSIC HOUSE I MANUFACTURES, EXPORTER & IMPORTER I SUPPLIERS TO ALL INDIA RADIO STATIONS / DARYA GANJ, DELHI – 6.
L. 126 x a. 33,5 x h. 25 cm.
Donación, Embajada de la India en Argentina, 1979. IM 631