El Consejo Social de la UNLP realizó esta mañana la primera reunión plenaria del año, que fijó su agenda de trabajo para el 2020. El acto fue encabezado por la Directora del Consejo Social, Inés Iglesias, que estuvo acompañada por los vicepresidentes del Área Institucional, Marcos Actis, y del Área Académica, Martin López Armengol.
El encuentro tuvo lugar en el Rectorado y contó con la participación de diferentes organizaciones sindicales y movimientos sociales, organismos públicos y educativos, concejales de la región y referentes de facultades y colegios de la casa de estudios platense.
Durante la jornada, Marcos Actis presentó los principales lineamientos del proyecto de la Fábrica de Alimentos Deshidratados, que la UNLP prevé llevar a cabo en los próximos meses. En ese sentido resaltó la importancia de que la universidad trabaje en consonancia con las demandas del Estado, para ponerse al servicio de la comunidad “La idea de la planta es darle valor agregado a la materia prima de nuestro cordón hortícola y colaborar con la tarea que lleva el gobierno en la lucha contra el hambre”
Por su parte, López Armengol resaltó la importancia del Consejo Social como “una herramienta útil y esperanzadora que la universidad pública pone al servicio de toda la comunidad y que consolida nuestro modelo inclusivo y solidario”.
Durante la actividad también se plantearon los ejes centrales de la conformación del Consejo Regional Argentina Contra el Hambre y se establecieron las prioridades para el año en curso.
En la actividad, todos los participantes coincidieron en destacar la trascendencia del Consejo Social como espacio de consenso y elaboración de proyectos.
El Consejo Social de la UNLP fue concebido como una instancia multisectorial para planificar acciones continuas para el desarrollo productivo y la recuperación de los derechos esenciales del conjunto de la comunidad y enriquecer a la Universidad en sus actividades de docencia, investigación y extensión con el aporte de todos los sectores sociales.
