Prosecretaría de Derechos Humanos

La Prosecretaría realiza un trabajo institucional en torno de los Derechos Humanos desde una concepción integral, que sustenta la reivindicación universalista de los mismos, profundizando la lucha contra la impunidad frente a graves violaciones y delitos atroces acaecidos en nuestra historia reciente; algunas de las cuales persisten y se reproducen en nuestro presente.

Los derechos humanos se han construido en el seno del capitalismo y en contradicción con él, en lo que respecta a la cuasi imposible realización de la igualdad material y a la erradicación de la exclusión. En este sentido, constituyen una referencia ineludible para las luchas sociales y políticas dirigidas a consolidar lo público y a fortalecer la Democracia. Su carácter histórico y contingente permite comprender, a partir de lo expresado en la construcción hegemónica de los marcos socio-jurídicos, la disputa simbólica por su interpretación legítima. Disputa que procura -desde una perspectiva crítica- poner en tensión la retórica de la autonomía, de la neutralidad y de la universalidad de los derechos, desde una nominación que problematice el acceso de los sujetos a las condiciones para su goce efectivo. Esta posición teórico-política reconoce la relación dialéctica de los derechos humanos con otros campos del espacio social (político, científico, económico, cultural entre otros), y sostiene una aproximación epistemológica interdisciplinaria, en diálogo con el sistema jurídico de protección que establece las características de: universalidad, indivisibilidad, integralidad, exigibilidad e interdependencia de los mismos.
Si bien los derechos humanos pueden clasificarse de diversas formas, escogemos aquí una especificación en relación con la materia que tratan, es decir considerando categorías jurídicas de carácter general que los ubican como: a) derechos civiles y políticos; b) derechos económicos, sociales, culturales y ambientales; y c) derechos de incidencia colectiva. Asimismo, se reconocen los principios de efectividad, que supone generar condiciones que permitan su realización material; progresividad, en el sentido de avanzar hacia su plena realización; y pro-homine que, en términos hermenéuticos, refiere a la necesidad de acudir a la norma más amplia o a la interpretación más extensiva cuando se trata de reconocer derechos protegidos, y a la inversa, cuando se trata de establecer restricciones permanentes a su ejercicio o a su suspensión extraordinaria.
Desde estas aproximaciones conceptuales, la política de Derechos Humanos de la Universidad procura constituirse en una dimensión transversal a la formación, poniendo especial énfasis en las reflexiones y propuestas que promuevan la defensa y profundización del derecho a la educación expresado en el art. 14 de la Constitución Nacional. En tal sentido, cobra relevancia el trabajo institucional con todos los actores de la comunidad universitaria, en pos de reasegurar el carácter público, democrático, autónomo y co-gobernado de la Universidad, a partir de los siguientes propósitos estratégicos:

  • •    Pensar los derechos humanos como área de conocimiento precisando, desde una perspectiva socio-histórica, su configuración en América Latina y en Argentina.
  • •    Profundizar la participación de la Universidad Nacional de La Plata en las políticas de Memoria, Verdad, Justicia y Reparación que contribuyan a efectivizar el juicio y castigo a los responsables del terrorismo de Estado y a erradicar la impunidad.
  • •    Identificar los desafíos de la sociedad contemporánea en relación al campo de los Derechos Humanos: universalidad y diversidad cultural; responsabilidad de los Estados en la prevención, sanción y erradicación de toda forma de violación de los derechos humanos garantizada por la normativa internacional y nacional; y en la promoción y protección de los DESCA.
  • •    Promover el debate público sobre los derechos humanos, respecto del pasado reciente y en la actualidad, problematizando la categoría “terrorismo de Estado” y el papel histórico que ha tenido el Estado en la Argentina y que hoy, a la luz de la política estatal de derechos humanos, nos impone reflexionar sobre cuestiones conceptuales fundamentales para aportar a una política emancipatoria.
  • •    Asumir colectivamente la lucha simbólica entre definiciones retóricas e interpretaciones legítimas de los derechos humanos, con énfasis en la generación de condiciones que efectivicen el acceso y la permanencia de los estudiantes en el nivel de educación superior.
  • •    Propiciar un trabajo formativo de carácter interdisciplinario que promueva el respeto a la multiculturalidad, a la identidad de género, a las libertades fundamentales y a la democracia como contenidos curriculares, de investigación y de extensión, de todas las propuestas educativas.
  • •    Promover un trabajo inter-institucional coordinando acciones con los poderes del Estado, con otras universidades, con las organizaciones sociales, sindicales y