1. Introducción.
El Movimiento Políticos por la Unidad (MPPU), del cual surgió la iniciativa de creación de nuestra Cátedra Libre, es una corriente de ideas y acción de vida que tiene su origen en la ciudad de Nápoles, el 2 de mayo de 1996. Se extendió rápidamente por Italia y el continente Europeo, adquiriendo una voz propia en el proceso de integración de este continente. Hoy está también presente en diversos países de América Latina, África y Asia.
En América Latina se constituye en el año 2001 en los países de Brasil y Argentina como respuesta a la necesidad de encontrar espacios de diálogo y participación en los profundos procesos de crisis y consolidación de las democracias. En el año 2003 se conforma en Uruguay y Paraguay. El Movimiento Políticos por la Unidad no es ni será un partido político. Su misión es animar procesos políticos inspirados en la fraternidad universal como contenido, método y fin de la acción política.
El Movimiento Políticos por la Unidad congrega a políticos, de diversos partidos y tendencias, a académicos y a muchas personas comprometidas con la vocación por las cuestiones públicas de la sociedad. Asumen el compromiso común de construir la unidad de la familia humana alentando un estilo político que a partir del reconocimiento y valoración de la heterogeneidad social promueva un orden nacional e internacional más justo, unido y fraterno.
Integran el MPPU, tanto a nivel internacional, nacional o local, de los países donde se desarrollan actividades, grupos de políticos, funcionarios, agentes de la administración pública, académicos, investigadores, estudiantes de las áreas de las ciencias sociales y políticas y ciudadanos que reconocen en la fraternidad universal el fin, el contenido y el método específico del compromiso político.
La iniciativa de la Cátedra Libre en la U.N.L.P. se inscribe en este objetivo de fortalecer, desde un espacio académico muy reconocido como es la Universidad Nacional de La Plata, la actualización, profundización y reflexión académica y científica del paradigma de la fraternidad en el contexto de la acción política de la sociedad actual.
2. La Fraternidad Universal como categoría política.
La fraternidad universal y la unidad de todos los hombres, objetivos del “Movimiento políticos por la unidad”, son hoy mas que nunca una aspiración profunda de la humanidad y una verdadera necesidad. El profundo anhelo de paz social que la humanidad hoy expresa, dice que la fraternidad no es solo un valor, no es solo un método, sino un programa para el desarrollo político.
La fraternidad es una categoría fundamental del proyecto político de la modernidad, sintetizado en el lema revolucionario francés: “Libertad, igualdad, fraternidad”; si de los dos primeros se ha logrado alguna realización parcial, la fraternidad ha sido aún más anunciada que vivida.
La fraternidad es la categoría política que expresa por excelencia el derecho de todos los seres humanos a estar incluidos en un proyecto común, valorando la dignidad, la diversidad y la libertad de cada uno. En este sentido adoptamos el principio de fraternidad como fin, contenido y método de la práctica política, lo cual implica la emergencia y constitución de un nuevo paradigma, que amalgama una visón, una nueva cultura política probada en practicas experimentadas por quienes adhieren a esta categoría, y una corriente de ideas y valores que es posible encontrarla en la matriz misma de las culturas latinoamericanas.
La fraternidad como fin, significa que el proyecto político de la fraternidad sienta como objetivo prioritario la inclusión y el desarrollo de los hombres y de los pueblos excluidos. Aspirar a un mundo más fraterno significa trabajar y actuar por un orden político y económico internacional más justo que sea expresión de una comunión de bienes ordenada según las exigencias de la reciprocidad y el desarrollo legítimo de todos los hombres; tendientes sobre todo a superar las graves brechas de la inequidad social.
Como contenido de la acción política, la fraternidad, encuentra plena expresión en el amor reciproco, del cual la vida democrática tiene verdadera necesidad: amor a la propia comunidad, amor entre políticos y ciudadanos, amor entre políticos. El compromiso político es una autentica vocación a dar respuesta a una necesidad del hombre, al sufrimiento de un pueblo o al logro de los proyectos más profundos de una comunidad. La política es, en su raíz, amor; por eso las diversas opciones políticas que responden a verdaderas exigencias sociales, son parte integrante de aquel bien común que solo juntos es posible construir.
Como metodología política la fraternidad implica la capacidad de “hacerse uno” con el otro valorando su diversidad. Hacerse uno en el dolor de los más desfavorecidos. Dialogar con todos, aún con el adversario. Saber escuchar, comprender su perspectiva. Esta actitud ayuda a superar particularismos, revela aspectos de las personas, de la vida, de la realidad, que amplían el horizonte político. El político que aprende el arte de “hacerse uno” con todos, se vuelve más capaz de comprender, de resolver pacíficamente las divisiones y de proponer iniciativas políticas con mayor base de sustento.
La fraternidad lleva a superar los confines de la propia patria para amar la patria del otro como a la propia. La más alta dignidad para la humanidad es la de sentirse un solo pueblo enriquecido por la diversidad de cada uno. Para lograrlo la fraternidad implica abrazar las divisiones, las fracturas, las heridas de la propia gente. Este es el precio de vivir en fraternidad, la condición para devolver a la política y a la sociedad el camino y la dignidad para reconocerse una única familia.
3. La Cátedra Libre Sociedad, Política y Fraternidad (Universidad Nacional de La Plata).
Los desafíos de los cambios políticos y sociales mantienen inexorablemente una estrecha relación con los espacios donde hombre y mujeres piensan, debaten y sistematizan las ideas, el impulso y la comprensión de esos cambios. La Universidad como tal fue históricamente ese espacio donde germinaron los escenarios de futuro. Hoy también es el ámbito de la Universidad donde se debe cultivar la anticipación de las visiones y valores de una sociedad en su tercer milenio.
En este sentido, la Universidad Nacional de La Plata cuenta con una larga tradición como ámbito receptivo no solamente a nuevas ideas sino también a la creación de espacios académicos alternativos donde estas ideas pueden debatirse y desarrollarse. La Cátedra Libre “Sociedad, Política y Fraternidad” se incluye en este tipo de actividades en el marco universitario, buscando contribuir al debate y circulación de ideas vinculadas al concepto de Fraternidad como categoría política. Concepto éste que hasta muy recientemente permaneció aletargado en los pliegues de la historia a pesar de haber sido uno de los componentes primigenios del tríptico revolucionario francés de 1789 que, junto a la Libertad y la Igualdad, ayudó a madurar la ciencia política en los tiempos modernos.
Efectivamente buscamos que el paradigma de la Fraternidad pueda instalarse como tema de interés académico, contando el mismo con todos los ingredientes propios del saber científico en cuanto a su desarrollo. De allí que sea la Universidad el espacio propicio para llevar a la práctica tal propósito.
4. Objetivos de la Cátedra Libre Sociedad, Política y Fraternidad.
a. Promover el desarrollo de una cultura política, económica y social anclada en el paradigma de la fraternidad.
b. Contribuir al reconocimiento del concepto de fraternidad como categoría de investigación y análisis de la vida social y política de los pueblos
c. Promover la actualización e incorporación de la categoría Fraternidad como objeto de estudio del mundo académico.
d. Propiciar estudios e investigaciones interrelacionando la categoría de la fraternidad en los procesos históricos – culturales y en el pensamiento socio-político contemporáneo.
e. Impulsar proyectos en la esfera pública, tanto de orden político, comunitario y académico, a través de instancias gubernamentales como no gubernamentales, inspirados en el principio de la fraternidad.
f. Difundir en la comunidad en general y en particular a los jóvenes, el principio político de la fraternidad como categoría de análisis de la práctica política y del proyecto de vida.