Semana del estudiante privado de su libertad

    Para visibilizar la situación de cientos de estudiantes universitarios de distintas Unidades Penales de la región, del 23 al 27 de septiembre, la Universidad Nacional de La Plata desarrolla actividades especiales en cárceles. 

    La iniciativa denominada “Semana del estudiante privado de su libertad” es una propuesta impulsada por el Programa de Acompañamiento Universitario en Cárceles, de la prosecretaría de Derechos Humanos de la UNLP, el Programa de Educación en Contextos de Encierro – FCJyS , Programa de Educación Superior en Contextos de Encierro “EduCa” – FPyCS , Programa de Acompañamiento a Estudiantes Privados/as de la Libertad – FaHCE, Secretaría de Extensión – Facultad de Bellas Artes, Atrapamuros – Organización Popular en Cárceles, La Reja – Voluntariado Universitario en Cárceles, Federación Universitaria de La Plata, Centro de Estudiantes de Derecho, Centro de Estudiantes de Comunicación Social y Centro de Estudiantes de Humanidades y Ciencias de la Educación.

    La semana incluyó una jornada en la Unidad 1 de Lisandro Olmos en la que se realizó un figurón en una de las paredes del Centro de Estudiantes Universitarios de la Unidad, el lunes 23 fue el turno de la Unidad 31 de Florencio Varela y contó con la participación del Quinteto de Vientos de la UNLP, y el viernes 27 habrá una actividad en la Unidad 9 de La Plata, con la actuación del Cuarteto de Cuerdas.

    Asimismo, en distintas Facultades con Programas de Educación en Cárceles se harán trabajos con estudiantes que asisten a cursar desde las Unidades Penales y con estudiantes liberados que continúan su vinculación con la Universidad.

    Desde el Programa de Acompañamiento Universitario en Cárceles de la UNLP se remarcó: “construir la educación en cárceles es defender la educación pública. La educación en cárceles funciona como una llave. Una llave para acceder a experiencias colectivas y compartidas de transformación. Una llave para abrir y sostener espacios educativos, capaces de enlazar en objetivos comunes a múltiples actores dentro y fuera de las unidades penales. Una llave, también, para problematizar la realidad carcelaria, reflexionando en conjunto sobre el acceso necesario a derechos en el encierro”.