Pesar por el fallecimiento del Doctor Adolfo Brook

    La comunidad de la Universidad Nacional de La Plata lamenta profundamente el fallecimiento del Doctor Adolfo Brook, quien se desempeñó por más de 25 años como director de Salud de esta casa de estudios y fue un verdadero referente en el campo de la medicina en nuestro país.

    Brook dedicó su vida a la salud pública y particularmente a su querida Universidad, donde dejó una huella indeleble por su calidad humana y profesional.

    Vanguardista, de espíritu incansable, impulsó políticas de salud que hoy son modelo y ejemplo para el sistema universitario argentino: la Libreta Sanitaria Estudiantil obligatoria, el examen médico-odontológico anual, la atención de enfermedades agudas, la atención domiciliaria, entrega de medicamentos gratuitos, vacunación, examen fonoaudiológico preventivo, cesación tabáquica, enfermedades pulmonares crónicas, capacitaciones en RCP, salud sexual reproductiva y no reproductiva y acompañamiento a embarazadas, accidentología, laboratorio clínico, prevención y detección del cáncer de útero, la atención Psicológica de baja complejidad,  campañas de prevención de dengue, VIH, enfermedades de transmisión sexual, virales, infectocontagiosas y vacunación.

    Brook inició su formación en la Escuela Graduada “Joaquín V. González”, egresó del Colegio Nacional “Rafael Hernández” en el año 1949 y obtuvo su título de Doctor en Medicina en el año 1956.

    En su trayectoria académica, ejerció el cargo de Jefe de Clínica, Profesor Adjunto y Profesor Titular con dedicación exclusiva de la Cátedra de Medicina Infantil de la Facultad de Ciencias Médicas.

    Tuvo una destacada actuación como médico pediatra en diferentes instituciones, iniciando sus prácticas en el Hospital de Niños de La Plata “Sor María Ludovica”, nosocomio en el que permaneció por más de 35 años, alcanzando el cargo de Director por concurso entre los años 1983-1987.

    Uno de los tantos hitos en su prolífica carrera consistió en impulsar, junto con el equipo de residentes dentro del Hospital de Niños, el primer servicio de terapia intensiva de la Provincia y el tercero del País. Este sistema de atención del cual fue jefe, permitió no sólo optimizar recursos, sino que cambió la metodología para resolver los problemas de niños y jóvenes favoreciendo su sobrevida, con una tasa de más del 80%.

    En el año 1978 estableció también en el Hospital, el primer servicio de transporte de niños graves utilizando aviones sanitarios y/o helicópteros.

    En el año 1986 fue convocado por el gobierno de la Provincia de Buenos Aires para ser Director de la Región Sanitaria XI, cargo que desempeñó hasta 1987, asimismo, fue Director de Salud Social de la Municipalidad de La Plata durante la gestión del intendente Pinto.

    En octubre de 1987 promovió por primera vez en la Provincia de Buenos Aires, un circuito de ambulancias ubicado en nosocomios de la ciudad de La Plata que permitía la conexión a 4 hospitales, regionalizando la atención brindada a través del 107 Atención domiciliaria coordinado.

    Su actuación en la región lo llevó a ser reconocido en el año 2021 por el Concejo Deliberante local como “Personalidad Destacada de la Salud de la Ciudad de La Plata”.

    Su aporte a la gestión de esta Universidad comenzó en el año 1996 en la Dirección de Salud, cargo que desempeñó hasta el año 2014 y desde ese entonces, hasta marzo del año 2022, ejerció el cargo de Director de Políticas de Salud Estudiantil.

    En septiembre de 2022, Adolfo Brook recibió en el Rectorado de manos del presidente Martín López Armengol, el merecido título de “Graduado Ilustre” de la Universidad Nacional de La Plata.

    En aquella oportunidad, en uno de los actos más emotivos que registra la historia de la UNLP, Brook se dirigió a los presentes que colmaron el salón del Consejo Superior para homenajearlo y dijo: “La UNLP te da la posibilidad de tener un título profesional, pero además te entrega algo que es mucho más valioso: el afecto y el cariño; esa es la gran distinción de esta Universidad”.

    Hoy despedimos al querido Adolfo con profundo dolor, pero con el firme compromiso de mantener vivo su legado. Hasta siempre, Doc.