Marcelino Ugarte

EXTRACTO DE LA MEMORIA ENVIADA AL GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES, MARCELINO UGARTE

En dicho documento defiende la importancia de fundar una tercera universidad que se diferencia de las clásicas de Córdoba y Buenos Aires. Es en este sentido, que pensaba en â€œque una tercera universidad del tipo moderno y experimental que se aparte de aquellas que, por su organización, diferente carácter y métodos de estudio, sistema de gobierno interior y direcciones especiales y prácticas de sus diversas secciones, no sólo tendría cabida fácil, sino que respondería a una necesidad evidente de todas las clases sociales en la Nación, y en particular, de las que miran más a la prosperidad general, bajo su faz científica y económica, que del solo punto de vista literario, al cual se han consagrado de preferencia los institutos docentes argentinos desde sus primeras fundaciones coloniales”.

Asimismo, González buscaba que la Universidad Nacional de La Plata se convirtiera enla alternativa hacia â€œlas carreras o aptitudes más útiles para la vida independiente y la propia elaboración del bienestar personal, que salvo algunas excepciones, no pueden obtenerse hoy en la escuelas existentes, orientadas casi todas en sentido de las especulaciones abstractas, de los títulos decorativos, y destinadas en general a la preparación de las clases docentes, profesionales o gubernativa”.

Más adelante agregaba: â€œ…hasta ahora, por falta de amplitud de criterio experimental, sólo se conciben las universidades dogmáticas, donde el núcleo apenas se extiende al ‘quadrivium’ del Derecho, a la Medicina, las Ciencias exactas, físicas y matemáticas, y la Filosofía; y cada vez que se insinúa la introducción de algún factor extraño, como el de esos nuevos departamentos de las ciencias, de fines menos aristocráticos aunque de igual valor científico intensivo, se alarma el criterio clásico, y sus viejos consejos académicos se estremecen como a la aproximación de una catástrofe o de un envilecimiento de los estudios.

No es éste un fenómeno argentino solamente: es de todas las sociedades antiguas o que se levantan sobre bases de una antigua tradición. Por eso, Oxford ha sido la última Universidad europea que ha aceptado la introducción de una cátedra de Ciencia de la educación en los cerrados cuadros de su clásico currículo”.

Entre nosotros, las innovaciones de esta clase son muy posibles y de fácil realización, gracias a nuestra reciente historia, y a la creciente ola de la influencia extranjera que afluye a nosotros en mil formas diversas, ya en libros y enseñanzas, ya en fuerzas económicas y étnicas, que debemos transformar en vigor propio por su asimilación y conquista definitiva. Pero como las dos universidades de Buenos Aires y Córdoba tienen sus moldes y caracteres propios, y sus gobiernos se hallan ya sancionados por un fuerte y antiguo sedimento consuetudinario, serán en ellas menos practicables las nuevas experiencias.

La Plata será pues, el laboratorio fecundo de experiencias que en las otras universidades no es posible emprender en tal sentido, sino como continuación de los métodos y sistemas comenzados y en acción; y una de las más importantes, a mi juicio, será la del Colegio universitario de enseñanza media, esto es, el mismo Colegio nacional secundario, puesto en correlación íntima con las diversas corporaciones o escuelas superiores, que tendrán en él su jardín de aclimatación, para transportar después sus ejemplares seleccionados a las aulas de la especialización, en ciencias naturales, físicas, matemáticas, astronómicas, agrícolas o sociales, realizándose allí, durante la observación inmediata de los seis años preliminares, la calificación espontánea de las vocaciones o direcciones intelectuales posteriores”.

Acerca de la importancia estratégica de fundar una Universidad Nacional en la ciudad, el ex gobernador de La Rioja afirmaba que â€œLa ciudad de La Plata, en su desarrollo de 24 años, si bien ha alcanzado una prosperidad considerable, no ha llegado a formarse una vida enteramente propia, ni asumir en toda su intensidad la dirección de los destinos de la vasta colectividad provincial sujeta a su hegemonía. Le falta, sin duda, definir con más singularidad su carácter e importancia social y política, y esto vendrá por sí mismo, cuando sea foco de atracción, elaboración e irradiación de una gran corriente de cultura, que no sólo satisfaga todos los anhelos y necesidades de la Provincia misma, sino también los que ya he mencionado, en el orden más dilatado de la vida nacional”.