Lucas Alberca y María Laura Sbaraglini, dos jóvenes investigadores de la Universidad Nacional de La Plata, resultaron becados por el comité organizador para exponer sus avances en uno de los mayores eventos científicos del mundo sobre enfermedades infecciosas. En el mes de mayo, participarán de la conferencia “Setting our sights on Infections Diseases”, organizada por el Wellcome Centre for Anti-Infectives Research (WCAIR), de la Universidad de Dundee, Escocia.
El Wellcome Centre es uno de los centros de investigación de mayor reconocimiento internacional dedicado al estudio de enfermedades tropicales desatendidas. Su objetivo principal es el desarrollo de nuevas metodologías y procesos que permitan encontrar tratamientos para este tipo de dolencias, de manera más rápida y eficiente.
Según la Organización Mundial de la Salud, se denomina enfermedades desatendidas a aquellas que se ven postergadas en las prioridades de la salud pública porque los afectados pertenecen a países subdesarrollados, son pobres y, consecuentemente, carecen de influencia política. Se estima que las enfermedades tropicales desatendidas afectan hoy a cerca de 1.000 millones de personas. Entre las principales dolencias se destacan el dengue, la rabia, la lepra, la enfermedad de Chagas, la malaria, la tripanosomiasis africana humana (enfermedad del sueño), la leishmaniasis, entre otras.
Lucas Alberca, Licenciado en Biotecnología, y María Laura Sbaraglini, Bioquímica, ambos Doctorados en la Facultad de Ciencias Exactas, se desempeñan en el Laboratorio de Investigación y Desarrollo de Bioactivos (LIDeB), donde se realizan investigaciones sobre enfermedades desatendidas.
Dentro del LIDeB hay dos líneas principales de investigación. Una se enfoca en la búsqueda de nuevos compuestos químicos que puedan utilizarse como anticonvulsivos para el tratamiento de la epilepsia y la otra, se orienta al descubrimiento y diseño de compuestos innovadores que puedan utilizarse para el tratamiento de enfermedades infecciosas, principalmente la Enfermedad de Chagas.
Sobre su trabajo como investigadora María Laura expresó: “inicialmente mi trabajo se basó en la búsqueda de nuevos compuestos para el tratamiento de la enfermedad de Chagas. Actualmente, mi labor está dirigida a la evaluación biológica de los compuestos seleccionados en el LIDeB. Es decir, una vez que los candidatos son seleccionados (por diferentes metodologías) se avanza a una serie de ensayos en células y, eventualmente, en animales de laboratorio, que permiten continuar con la investigación”.
Lucas, por su parte, se encuentra desarrollando modelos computacionales que permitan predecir si algunas de las moléculas presentes en las grandes bases de datos de compuestos químicos que se encuentran actualmente disponibles, pueden ser útiles para el tratamiento de ciertas enfermedades causadas por parásitos, como la Enfermedad de Chagas y la Malaria.
Para acceder a la beca del WCAIR los investigadores tuvieron que presentar un resumen de un trabajo de investigación, además de currículum vitae. El comité evaluador al momento de decidir a quién otorgarle el beneficio se basó en la calidad de los trabajos publicados y en aspectos relacionados con la formación académica.
El trabajo que presentará Lucas en la Conferencia a realizarse en mayo se titula: Descubrimiento de nuevos inhibidores de la Falcipaína 2 mediante reposicionamiento de fármacos asistido por computadoras. Allí se detalla cómo se realizó la identificación de nuevos inhibidores de la Falcipaína 2 de Plasmodium falciparum, una enzima fundamental para la vida del parásito que causa la Malaria.
Lucas Alberca explicó que, “la malaria es una afección que continúa siendo una de las principales causas de muerte en todo el mundo, y la mayor causa de decesos a nivel mundial en niños entre 5 y 14 años. Esta enfermedad es causada por un parásito que se denomina Plasmodium falciparum. En el trabajo que vamos a presentar lo que hicimos fue identificar, mediante la utilización de modelos computacionales, inhibidores de la Falcipaina 2 de Plasmodium falciparum (una enzima de este parásito), ya que se ha demostrado que ésta es muy importante para el parásito, y si la enzima no funciona (o es inhibida), el parásito muere”.
Y agregó, “de miles de compuestos químicos, nuestros modelos predijeron que sólo 11 podrían poseer la actividad inhibitoria que buscamos. Por lo tanto, comparamos 4 de esos compuestos y los evaluamos experimentalmente para comprobar si realmente tenían la actividad que predijeron los modelos. Encontramos que 2 de estos compuestos inhiben la actividad de la Falcipaina 2 y además logran disminuir la capacidad de proliferación de los parásitos”.
Por su parte María Laura presentará su trabajo denominado” Efectos de la co-administración de benidipina y clofazimina con benznidazol en un modelo murino de la enfermedad de Chagas crónica.”
Actualmente, existen sólo dos fármacos disponibles para tratar la enfermedad de Chagas, el benznidazol y el nifurtimox. Ambos requieren tratamientos prolongados y tienen efectos secundarios importantes, así como también una eficacia relativamente baja en la etapa crónica de la enfermedad. Es por ello que son necesarias alternativas de tratamiento más seguras y eficaces.
La investigadora explicó que, “a través del reposicionamiento de fármacos asistido por computadora, nuestro grupo ha identificado dos fármacos de uso clínico con actividad tripanocida: benidipina y clofazimina. Ambos mostraron resultados prometedores en modelos in vitro e in vivo. Se eligió probar las combinaciones de clofazimina o benidipina con benznidazol (droga de referencia). Estudiamos el efecto de los tratamientos en la actividad eléctrica del corazón, la inflamación del músculo esquelético y cardíaco, y la carga de parásitos en la sangre. Encontramos que todos los tratamientos mostraron una reducción en la carga parasitaria en la sangre periférica frente al control no tratado”.
En conclusión, con la ayuda de herramientas computacionales los investigadores del LIDeB, encontraron nuevos compuestos tripanocidas contra Tripanosoma cruzi, agente causal de la enfermedad de Chagas. Ambos disminuyen la carga parasitaria en el tejido sanguíneo y mejoran los marcadores de inflamación en el músculo. El tratamiento combinado mostró algunas ventajas, y podría ser una estrategia alternativa para reducir la dosis y / o la duración de los tratamientos convencionales.
Enlaces de interés:
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29888213
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/26891837
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29741140
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/27216381
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/25707014